Bienvenid@s a la nueva temporada desde la sección del lado humano, donde las personas siguen siendo el centro, desde las relaciones para la convivencia, la toma de decisiones, las capacidades, actitud, aptitud, en definitiva “la forma en que se hacen las cosas en una organización”.
En este artículo os quiero hablar de la importancia de la cultura en una organización y como puede moldear el destino de una empresa.
Cuando hablemos de cultura en una organización nos referimos a un sistema de valores y creencias que está compartido por todos los miembros de una organización, desde los comportamientos, actitudes, las relaciones, es la parte intangible o pilar invisible que sustenta a una organización, es la que no se puede ver ni tocar, pero su presencia se percibe en cada decisión, definiendo así el carácter de una empresa.
La cultura no siempre es lo que dice la página web a través de su misión o lo que la empresa pretende lograr, visión, la razón de la existencia de la empresa y valores, lo que la empresa representa, es la realidad de las personas que trabajan allí. Se manifiesta en en las relaciones interpersonales de la organización: ¿Cómo se relacionan las personas? De modo jerárquico, con cercanía, con respeto, con cierta distancia. En la forma de tratar a los clientes: como parte de la empresa, como una transacción… En el modo de percibir la relación con los grupos de interés: Les doy voz y voto, sólo voz. En la concepción de lo que implica ser un buen empleado: Trabajando muchas horas, estar siempre conectado, estar dispuesto cuando hay un trabajo extra. En la opinión que la empresa tiene de la paternidad y maternidad: Se ve bien para la empresa, contrato a una persona embarazada, facilito la transición de la persona que llega después del periodo de maternidad. En la actitud de los empleados con respecto: Al consumo energético, el compromiso social, la ética profesional.