Hay bastantes prejuicios contra las subcontratas, hasta el punto de hacer la analogía de “contratista = contra ti está”. Existen diferentes motivos, como la pérdida de control sobre el trabajo y el impacto que podría suponer en términos de pérdida de calidad, o a veces, los propios empleados de una organización, su inseguridad laboral, hace que puedan percibir a los subcontratistas como una amenaza para la seguridad laboral y pueden sentir que los trabajadores externos podrían ser una forma de reemplazo. Otro de los prejuicios muy arraigados es que los subcontratistas pueden tener problemas de cumplimiento ético e incluso legal, ya que, aparentemente su único objetivo es el de maximizar sus beneficios a costa de incrementar los precios, retorcer los términos y condiciones de los contratos, y rebajar la calidad y seguridad de los trabajos.
Empecemos por distinguir la subcontratación de la externalización. Aunque ambos conceptos buscan optimizar recursos, la subcontratación implica delegar tareas específicas a un proveedor externo para mejorar la eficiencia dentro de la empresa, manteniendo el control y la toma de decisiones internamente. Mientras que la externalización es un término más amplio que implica transferir funciones o procesos, o incluso unidades de negocio completas a una entidad externa (onshore u offshore), a menudo con impacto significativo en la estructura y estrategia empresarial. Hoy hablamos de la subcontratación.
¿Está justificada la inclusión de los subcontratistas como miembros integrales de los proyectos?
La versión 7 del PMBOK® del PMI® considera a los subcontratistas interesados externos del proyecto y como socios clave que contribuyen a una ejecución más fluida y eficiente del proyecto y por eso es esencial identificar, analizar y gestionar sus actitudes y necesidades, para establecer una comunicación clara, definir los roles que van a jugar y sus responsabilidades, y establecer las reglas de juego desde el principio. La gestión de subcontratistas implica una colaboración efectiva, evaluación de desempeño y una atención especial a la calidad y plazos acordados…
Jose Antonio Puentes 35 años de experiencia en diferentes funciones y departamentos como informática, calidad industrial, I+D, logística, comercial, y fundamentalmente Dirección de Proyectos; y en diferentes sectores: IT, Energía, Control de Calidad, I+D, Formación, Teleco, etc., tanto en organizaciones nacionales como multinacionales. Posiciones que ha utilizado activamente para colaborar en el desarrollo de la profesión de Dirección de Proyectos en España. Es Presidente fundador del PMI Capítulo de España, y ha presidido el Capítulo de PMI de Madrid hasta Febrero-2008.
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