Quienes me seguís desde hace tiempo sabéis que hay una idea que repito: el objetivo no es ser todo lo resiliente posible, sino suficientemente resiliente. Últimamente le estoy prestando más atención. He leído bastante y he actualizado mis enfoques. Y es algo que quiero compartir, creo que es útil, que puede ayudar. Para empezar, ¿qué significa exactamente eso de ser suficiente?
SUFICIENCIA: MÁS ALLÁ DE LA
ESCASEZ Y EL EXCESO
El concepto de suficiencia está ganando tracción en la investigación económica y social, especialmente en el contexto de la sostenibilidad.
Tradicionalmente, la economía se ha centrado en la escasez y el problema de la asignación eficiente de recursos limitados para satisfacer deseos ilimitados. La suficiencia, sin embargo, plantea un cambio de paradigma: busca un punto intermedio, más equilibrado. No se trata de vivir en la carencia (escasez) y tampoco de caer en el exceso o el derroche. El concepto replantea la gestión de recursos y se centra en determinar qué es suficiente para garantizar el futuro de la organización.
Vamos a empezar con una caricatura, para centrar el tiro. Como la serie de Berlanga (o el anuncio de un lavavajillas), tenemos a Villarriba y a Villabajo.
La empresa de Villarriba decide blindarse frente a cualquier turbulencia. Contrata a los mejores expertos, invierte en sistemas redundantes, diseña procesos ultraseguros y se prepara como si cada semana fuese a estallar una crisis global. Resultado: “máxima resiliencia” a costa de costes disparados, empleados agotados y proyectos clave que nunca despegan porque no queda presupuesto.
En el lado opuesto, la empresa de Villabajo minimiza la preparación hasta lo inimaginable. Confía en la inercia, en el “ya saldremos adelante, como hasta ahora” y, cuando llega la tormenta, pues no hay ni un triste paraguas a mano.
Difícilmente una organización con uno de estos dos enfoques va a prosperar. Así que vamos a explorar la suficiencia como marco para optimizar la resiliencia de las organizaciones.
SER SUFICIENTEMENTE RESILIENTE Hemos abordado la resiliencia organizacional desde diferentes ángulos, definiéndola como la capacidad de una organización para absorber y adaptarse en un entorno cambiante para poder cumplir sus objetivos y sobrevivir y prosperar.