El sentimiento de pertenencia del proyecto

No es nada nuevo decir que el direct@r de proyectos o líder de proyectos es la persona nombrada por la organización ejecutante para proporcionar el beneficio del proyecto a través de su resultado, por tanto, no tiene que ser un experto técnico, pero si un experto ejecutivo.

Sabemos también que es responsable de redactar el Project Management plan, de implantar un sistema de integrado de autorización de trabajos y de control de cambios, de asegurar la calidad, de evaluar el rendimiento del proyecto, de emitir las oportunas comunicaciones, de manejar a los stakeholders.

Un proyecto puede definirse como “una organización temporal “por tanto, tiene visión y misión y no hay nadie en el proyecto más adecuado que el direct@r o líder de proyecto donde el 90% de su tiempo tiene que  comunicar, negociar, solucionar problemas, resolver conflictos, gestionar equipos…y en un proyecto, los miembros del equipo y los interesados no están motivados e inspirados de la misma forma, depende en mayor grado de la conciencia sobre los objetivos individuales y de equipo, de las motivaciones, de los estilos de trabajo según las experiencias, la edad, la cultura, los roles… esto significa, que generar la apertura y confianza que necesita un proyecto requiere una alta dosis de comunicación adaptada para transmitir el valor del proyecto, con el objetivo de  promover el trabajo en equipo mediante la colaboración, e inspirar ese sentimiento de pertenencia tan necesario y valorado en un proyecto.

Según Guillermo Cornet, Cofundador de Team Insight “El sentimiento de pertenencia se puede definir como un conjunto de emociones, percepciones, necesidades y lazos afectivos que van formándose a partir de las experiencias y las prácticas diarias que se realizan junto a otras personas”. Pertenecer, es la experiencia de ser aceptado e incluido por aquellos que te rodean, ya sea por la organización, o en el proyecto.

Inspirar el sentimiento de pertenencia, por tanto, significa que las personas que son parte de un proyecto, se sientan integrados creando un sentimiento afectivo positivo que les llevará a trabajar motivados para lograr los objetivos del proyecto a través de los retos, incertidumbre que un proyecto desde un principio genera, mejorando su efectividad y productividad, enfatizando el sentido de identidad, continuidad y reconocimiento por parte de los demás.

El sentimiento de pertenencia ligado a la motivación por “hacer” mejora el nivel de eficiencia aumentando la productividad y con ello conduciendo al logro de los objetivos, mediante un entorno de trabajo cooperativo, comprometido y estable porque que aporta oportunidades de promoción a través de los logros y reconocimiento como equipo.

Se dice que cuanto más motivadas estén las personas más capacitado será el equipo, que cuanto más trabajo en equipo y contribución individual, mayor será el éxito del proyecto, ya que provocará más adaptabilidad para promover interacciones positivas y fluidas, mejora en los procesos e incremento de la creatividad, una habilidad muy valorada cuando el contexto y entorno en el que nos movemos en un proyecto es de incertidumbre la mayor parte del tiempo.

Un estudio publicado en el Journal of Personality and Social Psychology, indica: sentir que no se pertenece a un grupo o una organización, puede llegar a crear problemas físicos y estrés, afectando al rendimiento.

En un proyecto, las personas que se sienten aisladas emocionalmente del resto, aparte de crear un bajo índice de compromiso y desempeño para el proyecto, puede afectar al ritmo de la gestión de las actividades, que incluso llevándolo a un efecto dominó, generar retrasos e incrementar el costo en un proyecto.

“Lo mejor del trabajo en equipo es que siempre tienes a alguien al lado” Margaret Louise Carter.