Me siento una tarde primaveral en Barcelona para charlar con Ramsés Gallego quien, recién llegado de Phoenix, Arizona, USA, aparece con una caja negra bajo el brazo que contiene nada menos que el galardón recién recibido que le acredita como ISACA Hall of Famer. Lo que sigue es una estupenda conversación acerca de vivencias, pasado/presente/futuro de un gran profesional de nuestro país que viaja por el mundo ‘enseñando algo y aprediendo mucho’ (en sus propias palabras).
Ramsés, gracias por reunirte con nosotros y compartir este tiempo para saber más y mejor acerca de ti y tu trayectoria. Permite, en primer lugar, que te felicitemos por el reconocimiento y permítenos empezar con una pregunta clásica. ¿Qué se siente?, ¿qué nos puedes decir acerca de obtener un galardón que muy pocos pueden recibir?
Gracias a vosotros por la amable invitación a compartir con vuestros lectores una vivencia que resume, de alguna manera, más de dos décadas de servicio a la asociación (ISACA) y a la comunidad en general. Es realmente emotivo ser reconocido a nivel internacional y, de alguna manera, representar a nuestro país en la escena global. ISACA significa mucho para mí -habiendo jugado diferentes roles en la asociación tanto a nivel internacional en su Consejo de Administración como a nivel local, en el capítulo de Barcelona-, y recibir cariño y admiración de tantos capítulos por todo el mundo y tantos profesionales que han votado y dado su apoyo supone mucho para mí.
El trofeo que acredita tu entrada en el Salón de la Fama es precioso (una escultura en vidrio con un par de trazos en su interior en azul y verde -colores corporativos de ISACA-) pero veo que, además, llevas en un pin en tu solapa como muestra del orgullo que supone, ¿no es cierto?. Sabemos que llevas volados más de 3 millones de kilómetros alrededor del mundo, lo que equivale a más de 72 vueltas a la Tierra por el ecuador (!). ¿Cómo ves la escena mundial, qué está ocurriendo en el mundo que puedas compartir con nuestros lectores?
Sí, el pin me permite mostrar con orgullo mi pertenencia a tan selecto club y no llevar el trofeo a todas partes (risas). Pero lo realmente importante es exactamente lo que has dicho… ser embajador, de alguna manera, del país, del talento local, de la importancia de entender las diferentes dimensiones tecnológicas que impactan en la sociedad y articular un mensaje de valor en un mundo ‘as-a-Service’, que se siente acelerado (y, ¿amenazado?) por la Inteligencia Artificial, que requiere de ética, transparencia, confianza digital, honestidad, integridad, conformidad legal, coherencia estética y tecnológica,… Todo ello está ocurriendo… a la vez… como en la película ‘Todo, a la vez, en todas partes’ (risas). Ahora, la privacidad, el Gobierno de la nube, la protección de la información, la seguridad de aplicaciones, la monitorización de transacciones, el uso intensivo y extensivo de la algoritmia, etc. ocurre en todo lugar en cada momento. Me parece un momento de la historia (tecnológica y socialmente hablando) de inflexión. Creo que Internet lo cambió todo… ahora, con la IA todo debe cambiar… todo va a cambiar.
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